Plantas. Tu huerto despierta.
La primavera está a punto de llegar y con ella el momento en que el huerto renace. Toca ponerse manos a la obra para recoger sus frutos en unos meses.
En estas semanas de transición entre el invierno y el buen tiempo, la naturaleza empieza a jugar a favor de los cultivos: los días se alargan, las temperaturas son más suaves y van desapareciendo las heladas. Es el momento de preparar la tierra y los semilleros y reanudar las tareas necesarias para disfrutar de la cosecha.
planificar, lo primero
Es muy importante programar los cultivos y eso no consiste solo en el espacio del que disponemos para cultivar, sino también en realizar un calendario de cultivos para ir obteniendo los frutos de manera continuada. Así no nos encontraremos con un exceso de hortalizas en un momento dado y a continuación una escasez de productos.
preparar la tierra
A partir de ya mismo se puede remover y airear, si el frío la ha apelmazado, para luego abonar y fertilizarla para proporcionarle una buena cantidad de nutrientes, añadiendo una buena cantidad de compost o humus de lombriz, un estupendo abono natural que además protege los cultivos de bacterias y hongos.
cuidado con las plagas
Probablemente, el tiempo no se estabilice hasta dentro de unas semanas y esa inestabilidad trae consigo la proliferación de plagas y enfermedades, debido a que las primeras plantas que aparecen suelen estar débiles, por lo que se convierten en un objetivo estupendo para una gran cantidad de insectos. ¿Qué se puede hacer? Lo más efectivo es incorporar al agua de riego algún preparado que fortalezca las plantas y puedan combatirlos y, además, es imprescindible observar a diario los cultivos para poder detectar cualquier problema cuanto antes. Un consejo: si dispones de espacio suficiente, siembra entre las diferentes variedades de tus verduras y hortalizas unas cuantas plantas aromáticas porque van a contribuir a que las plagas no estropeen el ‘arranque’ de tu huerto. La mayoría de ellas son unos estupendos repelentes naturales contra muchos insectos y puedes utilizarlas en la cocina.
Qué sembrar
A final del mes de marzo, si no hay riesgo de heladas, se puede comenzar a sembrar directamente en la tierra las hortalizas de raíz: nabo, remolacha, rábanos y zanahorias.