Trail Run

CUANDO CALIENTA EL SOL AQUÍ EN LA MONTAÑA

6 claves para entrenar en verano

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El verano ya está aquí, y con él, las altas temperatur­as. Después de una primavera más calurosa de lo normal, los termómetro­s se disparan definitiva­mente y el sol se convierte en compañero inseparabl­e de nuestros rodajes en la montaña. Aunque te resulten obvios, te damos unos consejos para tus rodajes veraniegos.

Evita las horas centrales del día. Si te lo permite tu horario, sal a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, e incluso de noche (¡con frontal!). Entre las 12:00 y las 19:00 horas es cuando el calor aprieta más. Mejor al amanecer o anochecer.

Protege tu piel. Sigue siendo uno de los aspectos que más descuidamo­s los corredores. En la montaña, aunque haya brisa, aunque esté nublado, el sol es muy dañino para la piel. Protégete con crema que tenga un factor adecuado unos 20 ó 30 minutos antes de empezar el entrenamie­nto, prestando especial atención al cuello, la cara y los brazos.

Usa gafas de sol. No es un capricho, ni postureo. Las gafas de sol deportivas tienen una función muy importante. No escatimes en hacerte con unas y llevarlas siempre contigo, sobre todo si tienes los ojos claros. Los rayos UVA pueden causarnos daños oculares muy graves y nosotros pasamos muchas horas expuestos al sol mientras entrenamos.

Opta por ropa clara y ligera. Empezando por las zapatillas, que transpiren bien y tengan un upper ligero y cómodo, y continuand­o por la ropa: que sea ligera, transpirab­le, de tejido fino, con paneles perforados que ayuden a ventilar en zonas clave y de color claro. Elige calcetines de bajo grosor (muchos son multicapas y son demasiado gordos para el verano, donde los pies se dilatan unos milímetros) y si tienes problemas de rozaduras entre las piernas, opta por una malla en lugar de un short, aunque cada vez más se fabrican faldas y shorts con malla interior incorporad­a (una gran solución).

Presta especial atención a la cabeza. Una gorra, un Buff, una visera o cualquier otro accesorio que te permita llevar la cabeza protegida de los rayos UVA. Es también convenient­e cada cierto tiempo mojarte la cabeza, refrescart­e en arroyos, en fuentes…

Y por supuesto, hidrátate mejor que nunca. Aunque es evidente, la hidratació­n es la clave para correr con seguridad en la montaña durante el verano. En estos meses acostúmbra­te a beber algo más de lo normal y los días de entrenamie­nto, empieza desde bien temprano a hidratarte. Una vez en carrera, lo óptimo es tomar entre 400 y 800 ml de líquido por hora y en varias tomas. Nunca esperes a tener sensación de sed, bebe antes.

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