La montaña mágica
El fin de semana del 10 de junio la magia se apoderó del Vall de Núria con la celebración de la XI Olla de Nuria "renovada": nueva imagen y nuevo patrocinador, La Sportiva, en una prueba que reunió a algunos de los mejores corredores de nuestro país.
Allí en esas mágicas montañas se disputó primeramente el Kilómetro Vertical que llegaba a su segunda edición, un duro trazado de 6 kilómetros de distancia con un desnivel de nada menos que 1.850 metros positivos, en el que se impusieron Pere Rullán y Laura Orgué. La siguiente jornada estaba reservada para la clásica L’Olla, un trazado de 21,5 kilómetros que acumulaban un desnivel de 3.900 metros, una de las pocas pruebas que puede presumir de no pisar un sólo metro de asfalto en todo el recorrido y que además se disputa en su amplia mayoría a una altitud por encima de los 2.600 metros. Setecientos participantes se apostaban en la línea de salida, dispuestos a darlo todo en el recorrido, pero no sin antes dar un merecido homenaje al alpinista Ferrán Latorre que acaba de concluir con el ascenso al Everest su reto de coronar los 14 ochomiles del planeta. El recorrido de L’Olla asciende al Puigmal (2.913 m) y desciende por el Pic del Segre, para pasar también por el Coll de Finestrelles, ascenso al pico Finestrelles, y continúa por el Coll de Noufonts, para posteriormente descender por Pic de l’Àliga. En total 3.880 metros de desnivel acumulado en autosuficiencia en el que el más rápido de la jornada fue Jan Margarit con un tiempo de 2 horas 18 minutos, seguido de Antonio Alcalde con 2 horas 23 minutos y de Oriol Cardona, que cerraba el podio con un tiempo de 2 horas 25 minutos. En clasificación femenina la victoria fue para Laura Orgué, que alcanzó la línea de meta con un tiempo de 2 horas 52 minutos, seguida de Clàudia Sabata con un tiempo de 3 horas 3 minutos y Tina Bes, con 3 horas 25 minutos.