NICO MOLINA

« Si uno entra al perfil de Twitter de Nico Molina encuentra un tweet fijado desde el 1 de agosto de 2017. “Felicidades @ NicoMolina2000!! Cómo aprieta la juventud!!”. Lo firma otro chaval, menos joven, pero con un amor semejante por la montaña: Kilian Jornet. Nuestro protagonista lo guarda como oro en paño, e incluso nos confiesa que bromeaba con sus colegas: “Me hacía más ilusión la felicitación de Kilian que el propio campeonato que había conseguido”, comenta entre risas. Aún no conoce en persona a su ídolo, pero sigue sus pasos en las redes sociales para contagiarse de esa pasión única que Kilian transmite a sus seguidores. Porque Nico, sin duda alguna, es uno de los mejores productos del efecto Kilian, esa oleada de chavales que negaron al balón para subirse a las cumbres a golpe de zapatilla. “Yo me despertaba todas las mañanas y veía por la ventana de mi casa la sierra de Dúrcal. No supe lo que tenía hasta que fui. Antes había hecho otros deportes pero ninguno me llenó como este”, nos dice.

Al otro lado del teléfono está el doble campeón junior del Maratón de Zegama. Cuidadito. La próxima temporada probará con el Kilómetro Vertical de este emblemático pueblecito vasco. El mara- tón todavía le queda grande. Porque Nico no quiere equivocarse ni quemar etapas antes de tiempo. Nos dice convincente que aún le quedan dos o tres años para meterse en esos jardines. “También estudio, que es más importante que correr. Estoy acabando un grado medio de Técnico en Actividades Físico-Deportivas y el próximo año haré el superior”, espeta. Todo esto de correr empezó en el 2015. Y el tiempo le ha cundido como a pocos: ha sido campeón del mundo de Kilómetro Vertical y de Carreras en Línea en categoría Cadete y subcampeón del mundo de Kilómetro Vertical en categoría Junior. Va llenando la vitrina. Sus méritos no han pasado desapercibidos para La Sportiva, marca que le esponsoriza y le ayuda con sus desafíos deportivos.

Pedimos a Nico que nos diga cómo se ve en el futuro. ¿Tal vez ganando la Zegama de los mayores? “Eso no es que sea difícil de hacer, es hasta difícil pensarlo”, comenta. Y lo dice el chico que tiene el récord de la modalidad Junior. Le ponemos un escenario: Kilian y él pasando por el Andraitz y jugándose la victoria en un duelo final. “Eso sería un auténtico sueño. A Kilian ni siquiera he podido saludarle en persona, pero ojalá un día pueda ocurrir eso. Lo que sí tengo claro es que la primera maratón de mi vida será Zegama. Tengo ya un vínculo especial con esa carrera”, asegura. También lo tiene otro que todos sabemos…