CIEN AÑOS DE SOLEDAD

Gabriel García Márquez

Durante estos meses he tenido mucho tiempo libre, mucho, incluso para leer... Entiéndase el tono irónico de mi declaración, ya que “en esta casa” se lee de forma voraz y ávida todo lo que cae en nuestras manos. Dejando de lado la espero que evidente pátina irónica del comienzo, es cierto que el tiempo ocioso me ha permitido retomar lecturas que en su día me marcaron y que incluso como es el caso que nos ocupa, ya había leído en más de una ocasión. Cuando retomas algo como la lectura de un libro o volver a ver una película que en su día te gustaron mucho, al menos yo, lo hago con cierto miedo: ¿y si con el paso del tiempo aquello que te marcó en su momento se ha convertido en algo más insípido o, quizá, incluso, se te pueda atragantar? Mi experiencia me dice que puede pasar, pero "Cien años de soledad" nunca defrauda, podéis leerla cuantas veces queráis sin miedos, incluso leerla todos los días, que siempre sería esa ventana abierta magistralmente por Gabo al realismo mágico que tantos sueños y fantasías ha inspirado en todo el arte. Si alguno aún no habéis sido seducidos por la saga de los Buendía, ¡hacedlo por favor! daros un paseo por las calles de Macondo y disfrutad... Elegid la edición que queráis, hay muchas, algunas de una gran belleza como esta con la que ilustramos estas palabras. Fue un precioso e inesperado regalo que me hicieron durante estas semanas y me parece de una belleza espectacular merced a las ilustraciones de Luisa Rivera.