UN HUMANO LLAMADO KILIAN JORNET
Lo que puedo haber sido y no fue
Kilian Jornet posiblemente pase a la historia como uno de los grandes deportistas de todos los tiempos. Nunca se ha amilanado ante los retos, y tampoco es que estos sean sencillos y fáciles, ni para él ni para nadie. En la mayoría de las ocasiones ha conseguido conquistar sus objetivos a la primera, pero otras veces no ha obtenido el resultado para el cual tanto había trabajado. Muchos deportistas quizás se hubieran hundido al no cumplir dichos objetivos, pero Kilian ha asimilado esos momentos difíciles o de desacierto para rehacerse y reafirmar lo excepcional que lo caracteriza, alguien que está entregado a sí mismo, a la búsqueda de la perfección y a la constante evolución a través del deporte y el respeto por el medio que lo rodea. Y aunque muchos lo consideren un extraterrestre, seguramente Kilian sea uno de los humanos con más humanidad que habita en este planeta y eso lo convierte en una persona extraordinaria.
Cavalls del Vent
Uno de los primeros traspiés que sufrió Kilian, fue en Cavalls del Vent, donde inesperadamente debido a la fatiga y la presión sufrida, decidía abandonar la prueba cuando marchaba en segunda posición a pocos segundos de Miguel Heras. Corría el año 2011 y Kilian había logrado ese mismo año vencer en la Ultra Trail du Mont Blanc, en Western States 100 miles y en Zegama Aizkorri. Eran años en los que los calendarios de carreras se tornaban interminables, predominaban las largas distancias y la presión mediática no era de gran ayuda, una factura que iba engordando y que los deportistas de máximo nivel terminaban pagando.
Diagonale des Fous
La “Diagonal de los Locos” ha sido una de las carreras que más prestigio ha ido acumulando con el paso de los años. Su trazado de 170 kilómetros con un desnivel positivo de 10.000 metros atraviesa la isla Reunión de sur a norte. Kilian Jornet logró imponerse en la Diagonale des Fous en 2010 y 2012. Pero en la edición de 2013, Kilian dejó de pelear por la victoria entorno al kilómetro 60 alegando molestias musculares. En esa ocasión decidió no abandonar, sino adaptar el ritmo de carrera y disfrutar de un recorrido único. Con el paso de las horas fue alcanzado por Emilie Fosberg, con quien logró cruzar la línea de meta tras 31 horas 29 minutos de carrera.
Intento de récord del mundo de KV
El kilómetro vertical de La Fully ha sido la referencia para designar el récord del mundo de esta disciplina. Mil metros de desnivel positivo en apenas 1.920 metros de distancia. Corría el año 2016, Kilian competía por primera vez tras haber intentado hacer cima en el Everest. Como siempre, su nombre aparecía en todas las quinielas no sólo para vencer, sino además para hacerse con el récord del mundo de la disciplina logrado allí mismo por Urban Zemmer con un tiempo de 29 minutos 42 segundos. Jornet comenzó la prueba apretando muy fuerte, pero a partir de la mitad de carrera sus piernas comenzaron a sentir fatiga. Lejos de lograr la victoria Kilian consiguió alcanzar la meta con un tiempo de 30 minutos 33 segundos en cuarta posición, la victoria en esa ocasión era para Nadir Maguet, seguido de Urban Zemmer y Marco Moletto.
Primera ascensión al Everest
El 22 de mayo de 2017, Kilian Jornet conseguía hacer cima en el Everest con un tiempo de ascenso de 26 horas y 31 minutos. Esa primera cima estuvo marcada por la controversia. La altitud máxima registrada por su GPS marcaba 8.593 metros, lejos de los 8.848 metros que posee la montaña más alta del planeta. A la controversia se añadía las declaraciones de dos de los escaladores con los que Kilian afirmaba haberse cruzado durante el descenso (a 8.700 metros de altitud), estos aseguraron posteriormente que no se habían cruzado con nadie cuando asaltaban la cima y que no habían seguido sus huellas en los últimos 150 metros de ascenso como afirma el propio Jornet. La falta de pruebas gráficas siempre ha sido el gran foco de quejas sobre ese ascenso. El 27 de mayo, tan solo unos días después Kilian volvía a conquistar la cima del Everest, esta vez su registro era de 17 horas de ascenso para un total de 28 horas de actividad.
Kilian tras la sombra de Carpenter
El año 2019 destacó por ser uno de los años en los que Kilian Jornet realizó menos carreras, de hecho, en su calendario sólo figuraban tres: Zegama Aizkorri, Sierre Zinal y Pikes Pike. En todas ellas el objetivo era dar el 100% y posiblemente hacerse también con el récord de todas ellas. En las tres pruebas Kilian consiguió la victoria. En Zegama Aizkorri peleó por el récord duramente, pero las altas temperaturas fueron rival infranqueable para todos los corredores, convirtiendo esa edición en una de las más duras que se recuerdan. En Sierre Zinal, Kilian sí que logró su objetivo con creces, se hizo con la victoria y el récord de la prueba. Ya sólo quedaba enfrentarse a Pikes Peak. La expectación en esa carrera fue máxima. Kilian consiguió ir en tiempos de récord durante el primer tercio de la prueba, pero poco a poco la sombra que había dejado una leyenda como Matt Carpenter se alejaba de tal manera que el atleta de Salomon hacía paso por la cima con 8 minutos de penalización sobre este.
Un récord inalcanzable
Durante los últimos meses Kilian ha estado experimentando y saliéndose de su zona de confort de una manera constante. Si primero se lanzó a realizar una prueba de 10 kilómetros sobre asfalto luego llegó por sorpresa para todos, el anuncio del intento de batir el récord del mundo de 24 horas en pista establecido por Yiannis Kouros en 1994 fijado en 303 kilómetros de distancia. Pese a que las condiciones climatológicas eran bastante duras Kilian franqueado por otros cinco atletas se lanzó por el récord, y pese a rodar a un ritmo excepcional, por momentos sus tiempos de paso se alejaban de los marcados por Kouros. Tras casi once horas de máximo esfuerzo, Kilian comenzó a sentirse mareado y tuvo que ser atendido en la misma pista, siendo posteriormente trasladado al hospital para la realización de prueba médicas. Poco antes de sufrir ese mareo Jornet sintió un dolor muy agudo en el pecho. Al salir del hospital al día siguiente confesó que ese mismo dolor lo había sufrido en otra ocasión, pero que no le había dado importancia porque igual que había venido se había ido. Kilian siempre ha peleado por el más difícil, y seguramente sus retos seguirán siendo igual de ambiciosos o más, ahora toca descansar y recuperarse, porque queremos disfrutar con él muchos más años.