EN LAS DISTANCIAS CORTAS

¿Cuál es tu mejor recuerdo de la infancia? Estar jugando en el campo con mis amigos e irme al río a buscar ranas o pasear con mi padre por la sierra del pueblo buscando setas. ¿Cuándo fue la última vez que lloraste? Me emocioné mucho el otro día cuando gané la carrera en Teror, el Desafío de los Picos. ¿Qué programa o serie de televisión son tus favoritos? La verdad es que entre el trabajo, el entrenamiento y la familia no veo prácticamente la televisión. ¿Qué libro has vuelto a leer? Nunca repito libro. ¿Qué libro nunca pudiste acabar? Últimamente me cuesta mucho terminar los libros porque el cansancio puede conmigo y mi tiempo libre lo dedico a descansar. ¿Un consejo que hayas recibido que no quieras olvidar? Piensa en positivo y todo saldrá bien. ¿Qué te gustaría ser de mayor? Yo creo que ya soy mayorcito (risas) pero si volviera atrás, estudiaría algo más de lo que llegué a estudiar en su momento. Pero en ese tiempo fue más fácil terminar un grado medio de FP e irme a la obra de albañil a ganar dinero. Si volviera a vivir esa oportunidad, intentaría trabajar en algo relacionado con el deporte (maestro, entrenador...) Aunque ahora que lo pienso, nunca es tarde. ¿Un personaje histórico? En el deporte, Johan Cruyff. - ¿A qué huele la montaña? A pureza. ¿Tu tesoro más preciado? Mi familia ¿Dónde habita tu felicidad? Con mi gente y en la montaña. RAÚL ORTIZ CABELLO Estaba claro que lo suyo iba a ser el deporte, de una o de otra forma en una u otra actividad o especialidad. Sería el fútbol grande, el fútbol sala, el baloncesto o el atletismo, sus piernas lo rubricaban desde bien pequeño por las calles de Villanueva del Rosario (Málaga), ante las miradas de los vecinos, “este niño no para quieto”. La llamada atlética le llegó ya pasada la primera veintena, fue cuando se descubrió corriendo por la ribera del Guadalhorce, ¡había encontrado su deporte! Y como una cosa lleva a la otra y mucho más cuando te has criado a las faldas de las sierras de Camalobos y el Jobo, lo de echarse a correr por el monte ya estaba en su pasaporte genético, solamente había que dejarlo fluir. Las subidas a El Chamizo se sucedían como entrenamiento favorito y no tardaron en llegar los resultados, primero en casa, en el Chamizo Trail donde ha ganado prácticamente todas las ediciones, una lesión le dejó fuera de una de ellas. Raúl es un hombre de Club, con el Alpino de Benalmádena han ocupado sucesivamente las tres plazas de podio en los Campeonatos de España de Carreras por Montaña. Su último gran resultado fue en la prueba de la Copa de España de CxM, Desafío de los Picos, donde se impuso a Zaid y a Asier Larruzea. A las 5 de la tarde no es fácil pillarle despierto. No, no es que sea un amante y practicante del deporte de la siesta es que a las 12 de la noche le suena el despertador. Raúl es el panadero del pueblo. No sabemos si aprovechará el momento del reparto para acumular kilómetros…