Bizcochos de anís con sorbete de uvas y vino tinto

Para 16 bizcochos.

Dificultad: media.

Elaboración: 30 minutos (+ 1 día de reposo y 3 horas de reposo y horno).

Ingredientes: 500 g de harina (y un poco más para el molde), sal, 20 g de levadura fresca, 260 ml de leche (más 1 cucharada), 50 g de azúcar, 50 g de mantequilla (y un poco para el molde).

Ingredientes para la cobertura: 100 g de mantequilla fresca, 80 g de azúcar blanquilla, 3 cucharaditas de granos de anís.

Coloca la harina en un bol. Desmenuza la levadura en agua tibia, hasta que se deshaga, y añádesela a la harina, junto con el azúcar, la leche, la mantequilla y una buena pizca de sal. Agita con una batidora de mano hasta conseguir una textura esponjosa; cubre el resultado, deja que repose 45 minutos para que doble su tamaño y, transcurrido ese tiempo, vuelve a trabajarlo. Engrasa un molde de aproximadamente 30 cm de longitud con un poco de mantequilla y espolvorea por encima una pizca de harina. Pon la masa dentro, cúbrela 30 minutos para que crezca y pinta su superficie con 1 cucharada de leche. Hornea el bloque a 200 ºc durante 20 minutos, hasta que notes que empieza a dorarse. Entonces, espera a que se enfríe un poco, desmóldalo y resérvalo 24 horas. Transcurrido ese tiempo, corta el bizcocho en rebanadas de 1 cm de grosor y colócalas sobre una bandeja; con una brocha, extiende sobre ellas un poco de mantequilla de forma uniforme y espolvorea por encima la mezcla del azúcar con el anís. Por último, hornéalas 15 minutos. Apaga el horno, mantén su puerta cerrada y deja que los bizcochos se sequen con el calor residual durante 1 hora más. Sácalos para que terminen de enfriarse y sírvelos acompañados por el sorbete. Para que no se resequen, mételos en un recipiente hermético y guárdalos en un lugar fresco y seco.

Para 4-6 sorbetes.

Dificultad: baja.

Elaboración: 30 minutos (+ 7 horas de congelador).

Ingredientes: 5 cucharadas de zumo de limón, 150 ml de vino tinto, 150 g de azúcar blanquilla,1 kg de uvas moscatel.

Coloca el zumo de limón, el vino y el azúcar en una cacerola, llévalos a ebullición y cocínalos durante 4 minutos. Viértelo todo en un bol y deja que se enfríe. Aparte, lava bien las uvas, sécalas y quítales las semillas; hazlas puré con una batidora, pásalas por un colador y quédate con su zumo. A continuación, mezcla 500 ml de ese licuado de uvas con el sirope de vino que has preparado antes y deja que se enfríe en la nevera durante al menos 1 hora. Utiliza una heladera para congelar el sorbete. Si no dispones de una, mete la mezcla en el congelador. Durante las primeras 2 horas, remuévela cada 30 minutos con una batidora de mano, hasta conseguir una textura homogénea. Luego, hazlo cada hora (aproximadamente, en un período de un total de 4 horas), para asegurarte de que tenga una consistencia suave y de que el sorbete esté en su punto. Sírvelo con unos bizcochos de anís.